¿Te sienta mal la leche? Con las pruebas RAST podrás descartar si eres alérgico a la proteína de la leche, y también a la lactosa, en un simple análisis de sangre. Tu servicio médico al mejor precio.
Las pruebas RAST son unos análisis sanguíneos que miden los niveles de anticuerpos IgE frente a un determinado alimento, proteína, alérgeno etc. Con este análisis se medirán los niveles de anticuerpos IgE frente a las proteínas de la leche y de la lactosa.
RAST LactoalbúminaRAST LactoglobulinaRAST Lactosa
A continuación te mostramos las ciudades en dónde puedes realizar el servicio de Alergia a la Proteína de la Leche y Lactosa.
Top ciudades más importantes:
Las pruebas RAST son unos análisis sanguíneos que miden los niveles de anticuerpos IgE frente a un determinado alimento, proteína, alérgeno etc. Para ello, el laboratorio te toma una pequeña muestra de sangre que será mezclada posteriormente con el alérgeno a estudiar.
En el caso de que en la sangre se produzca una determinada cantidad anticuerpos IgE, se podrá conocer si eres o no alérgico. Las pruebas RAST son utilizadas habitualmente por Alergólogos en sustitución a las pruebas cutáneas (Prick Test).
Con este análisis se medirán los niveles de anticuerpos IgE frente a las proteínas de la leche y de la lactosa. Los resultados de las pruebas RAST serán de gran ayuda a tu médico para realizar cambios en tu dieta, como restringir o limitar su consumo.
Este perfil analítico incluye los siguientes 3 análisis RAST:
- RAST Lactosa
- RAST Lactoalbúmina
- RAST Lactoglobulina
Para mejorar tu rendimiento físico y detectar carencias o problemas a tiempo, se recomienda a los deportistas realizar un análisis de sangre y orina.
Conoces tus niveles de serotonina a través de un análisis en sangre. La serotonina es una hormona que tiene relación directa con tu estado de ánimo.
La vitamina B9 (ácido fólico) es muy importante durante el embarazo, ya que puede ayudar a prevenir la aparición de malformaciones congénitas del feto como la espina bífida.
Tras hemorragias inexplicables o antes de una cirugía es muy habitual hacerse una analítica para verificar que no exista un problema de coagulación sanguínea.