Este análisis de sangre se realiza cuando se quiere comprobar si se tienen o no los valores normales de glucosa en sangre y cuando existe la sospecha de que se puede tener hiperglucemia (azúcar o glucosa alta) o hipoglucemia (azúcar o glucosa baja).
Existen varios síntomas que hay que tomar como alerta en cuanto a desviaciones respecto a los niveles normales de azúcar, como puede ser tener mucha sed, piel seca, orinar con mucha frecuencia, visión borrosa, debilidad, cansancio, visión doble, irritabilidad, dolor de cabeza, temblores, sudoración, confusión, taquicardias, nerviosismo, aumento del apetito, dificultad para dormir, etc.
La hiperglucemia se produce cuando el cuerpo genera poca insulina (hormona que ayuda al cuerpo a almacenar el azúcar o glucosa en el músculo o grasa) o no responde a ella, con lo cual serías diagnosticado con diabetes.
La hipoglucemia se produce cuando el cuerpo agota el azúcar rápidamente, o se libera mucha insulina por la sangre. Esto les puede pasar a diabéticos que están bajo tratamiento con insulina, personas con falta o deficiencia de alguna hormona, infección, insuficiencia grave del hígado, riñones o corazón.