Publicado por: Ángel Amilibia Hergueta | ISNI: 0000000517782974
Notar chasquidos en la mandíbula a la hora de masticar, o simplemente cuando abres y cierras la boca, puede ser síntoma de un trastorno de la articulación temporomandibular (ATM). Aunque mucha gente no le presta atención y se acostumbra a vivir con esta molestia es recomendable acudir a un dentista para que examine tu caso. De lo contrario, ese crujido puede ir a más y presentar más complicaciones.
La articulación temporomandibular (ATM) son los puntos en que los maxilares superiores e inferiores se enganchan al cráneo, permitiendo que podamos comer, hablar o reír. Al poner los dedos en tu cara, justo delante de las orejas, notarás cómo se mueve la mandíbula si abres y cierras la boca. Si todo funcionara bien, deberías sentir que se mueve de forma suave, coordinada, indolora y sin ruidos.
Si existen chasquidos en la mandíbula suele significar que alguna de las partes no funciona correctamente al moverse, desde el disco, los cóndilos y los ligamentos hasta las cavidades o los músculos. Sin embargo, no todas las personas a las que les suena la mandíbula tienen problemas de ATM.
Es posible sentir como cruje la mandíbula al realizar acciones como masticar, abrir y cerrar la boca o moverla hacia los lados. También pueden aparecer otros síntomas como dolor, inflamación, tensión o bloqueos. El dolor también puede trasladarse hasta el oído, la sien, los dientes o el cuello.
La razón principal que provoca la mayoría de trastornos en la ATM es que el disco o el menisco articular no están colocados correctamente. Aunque solo exista un desvío milimétrico de la mandíbula será normal que ocurran chasquidos.
El desgaste dental, de las articulaciones y de los huesos de la mandíbula también puede influir en la aparición de ruidos y dolores. Suelen ocurrir por malas posturas de la cara, por ejemplo al dormir o al estar delante del ordenador. Además, tener el hábito de apretar fuerte los dientes, por ejemplo cuando estamos en tensión, conlleva problemas a largo plazo.
Otros malos hábitos son masticar de forma excesiva, por ejemplo al mascar chicle, y abrir de forma exagerada la boca al bostezar.
En el momento que notes un chasquido en la mandíbula debes visitar un odontólogo. Será el especialista encargado de realizar un chequeo médico, muchas veces acompañado de una ortopantomografía.
El tratamiento a seguir cuando se presentan problemas en la articulación temporomandibular puede ser distinto dependiendo de la gravedad, de las consideraciones del doctor y de la voluntad del paciente. Los tratamientos odontológicos, la fisioterapia y la medicación suelen ser procedimientos habituales.
Además, cambiar ciertas conductas te ayudará a dejar de sentir chasquidos en la mandibula. Por ejemplo:
Recuerda que la mejor posición de la mandíbula es cuando está en reposo, con la boca cerrada y los labios juntos.