Publicado por: Ángel Amilibia Hergueta | ISNI: 0000000517782974
Para algunos, los pinchazos en el pecho son como aguijonazos ponentes, mientras que otros los describen como auténticas puñaladas que no dejan terminar la respiración. La sensación es tan angustiante que llega a asustar. Pero, realmente, ¿qué son? ¿Lo que pincha es el corazón? ¿Es algo grave?
En este artículo te vamos a resolver estas dudas y más, así que si tienes pinchazos en el pecho frecuentemente te interesará seguir leyendo.
Si eres joven y no tienes ningún factor de riesgo cardiovascular, como podría ser el colesterol, la diabetes, una tensión alta o ser fumador, no deberías preocuparte por esos pinchazos. Sin embargo, sí que deberías tenerlos en cuenta por los motivos que verás en los siguientes apartados.
Si, en cambio, tienes algún factor de riesgo o te ocurren muy a menudo, te recomendamos que realices una visita a un cardiólogo. Aun así, debes saber que las dolencias en el corazón no se manifiestan en forma de pinchazo, sino más bien como un dolor opresivo, como si una losa apretara el pecho. Además, también suele manifestarse con dolores en la mandíbula, el hombro o el brazo izquierdo, dura mucho más rato que ese aguijonazo y los latidos van más lentos de 40 por minuto o más rápidos de 150 por minuto.
De todas formas, la mejor manera de saber si se padece alguna patología relacionada con el corazón es realizando un electrocardiograma. Si tu único síntoma han sido los pinchazos en el pecho, debería salir normal.
Descartada su vinculación con el corazón, nos preguntamos qué son esos pinchazos en el pecho. Pues, simplemente, se trata de un síntoma de la ansiedad, igual que lo son la sensación de falta de aire, el nudo en el estómago o las palpitaciones aceleradas.
Seguramente pensarás que en tu caso no se trata de ansiedad, ya que te ocurre en el sofá de casa y no antes de una presentación en el trabajo. Pues estás equivocado. Aunque el período de estrés haya pasado, los niveles de cortisol son elevados y, aunque intentes relajarte, tu cuerpo es incapaz de hacerlo. Por eso los pinchazos aparecen en los momentos más imprevisibles.
Como puedes intuir, lo mejor que puedes hacer para aliviar las punzadas en el pecho será tranquilizarte. Para ello, te recomendamos que sigas los pasos de la respiración diafragmática:
Si ves que los pinchazos suceden muy a menudo y tu médico determina que es por culpa del estrés, deberías acudir a un experto en psiquiatría.
Si te cansas más de lo habitual, te falta el aire cuando haces ejercicio, sientes dolor en el pecho, tienes los niveles de colesterol altos o sufres diabetes o hipertensión, es importante visitar al cardiólogo para controlar y evitar posibles enfermedades.
Síntomas como la depresión, la bipolaridad, la esquizofrenia, la ansiedad o los ataques de pánico pueden ser consecuencia de un problema de salud. El psiquiatra puede ser el especialista más indicado para ofrecerte una solución.