☎️ 931 226 223 | Presupuesto | Descarga Resultados | Reseñas ★4,5 | Habla ahora con un médico · Prueba ETS · SIBOPLUS · Analítica General · Resonancia · Test Prenatal
☎️ 931 226 223 | Presupuesto | Resultados | ★4,5 | Habla ahora con un médico · Test ETS · SIBO · Analítica General · Resonancia · Prenatal
Publicado por: Ángel Amilibia Hergueta | ISNI: 0000000517782974
Los linfocitos son un tipo de glóbulo blanco que tiene la importante función de evitar infecciones y proteger al organismo de cualquier agente extraño. Por eso, cuando se detecta una variación en su número en un análisis de sangre completo es necesario estar alerta, ya que podría ser consecuencia de un problema grave.
A continuación te explicamos cuándo deberías preocuparte por tener los linfocitos altos, qué indican y cómo puedes ponerle remedio.
El porcentaje de linfocitos en sangre representa entre el 20 y el 40% de los leucocitos totales. Traducido en cifras, esos valores normales son:
Si tras un hemograma los valores son superiores a estos, hablaremos de linfocitosis. Si fuesen menores, ese descenso se conoce como linfopenia.
Hay dos tipos de linfocitosis dependiendo de las causas que la provocan: la monoclonal y la policlonal.
La linfocitosis monoclonal está relacionada con un defecto linfoide que provoca un aumento de linfocitos. Es el caso de enfermedades como:
La linfocitosis policlonal suele estar relacionada con infecciones víricas o bacterianas como:
Ese aumento de linfocitos también puede ser provocado por:
Es posible tener los linfocitos altos y que no se manifieste ningún síntoma, de manera que no se tenga conciencia de esa situación hasta que aparezca en un hemograma.
Hay que destacar que tener los linfocitos altos, igual que con los leucocitos altos, no es una enfermedad. Se trata de una condición provocada por una enfermedad o virus. Por lo tanto, los síntomas de la linfocitosis variarán dependiendo de la patología que la provoca.
Entre los más comunes encontramos:
Como se ha mencionado, los linfocitos altos no son una enfermedad, sino una consecuencia. Por lo tanto, el tratamiento irá orientado a curar el trastorno, no solo la linfocitosis. Para determinar qué pasos a seguir son los más adecuados será necesario acudir a un hematólogo.
En el caso de una infección, los antibióticos, antivirales o los antiinflamatorios suelen ser parte del tratamiento. Si se trata de algún tipo de cáncer, puede que sea necesario pasar por procesos como la quimioterapia, la radioterapia o un trasplante de médula.
Para bajar los linfocitos de forma natural, además de cumplir con las indicaciones del médico, debes seguir una dieta equilibrada y rica en vegetales, cereales y alimentos que lleven hierro, zinc y vitamina C. También es necesario reducir el estrés, ya que produce un desequilibrio en el sistema inmunológico, y beber mucha agua para liberar toxinas.
Un completo chequeo de sangre y orina con 15 análisis que cubren Colesterol, Infección de Orina, Función Hepática, Renal, Hemograma etc. para prevenir y cuidar tu salud.
Si tienes alguna enfermedad de la sangre como anemia, trastornos hemorrágicos o de coagulación, leucemia, hemofilia o necesitas un control del Sintrom, un hematólogo es tu especialista. No esperes más para resolver tus dudas y pide una visita con uno de nuestros médicos.