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En el caso de que seas mujer, no tengas dudas en llevar a cabo de manera periódica un control de tus senos mediante una mamografía llevada a cabo en periodos de un año. Esta estrategia cobra una vital importancia para encontrar de forma prematura cáncer de mama en estado inicial.
Centre Mèdic Les Moreres
C/ Dels Afores, 49-51
Ripollet del Vallés
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IMPORTANTE: En el caso de no tener Prescripción / Volante médico, clickea aquí para consultar nuestro servicio de Visita previa de Ginecología y Mamografía bilateral.
La mamografía es un test diagnóstico preventivo que consiste en una radiografía de la mama para detectar signos de cáncer en sus etapas iniciales, aún de forma asintomática. Existen las mamografías convencionales y las mamografías digitales, donde los informes se traducen directamente en documentos digitales.
Caso de que a lo largo de una exploración hayamos detectado algún bulto anormal, se utiliza para descartar o confirmar la existencia de un tumor. Hasta entonces, es importante no alarmarse, puesto que otras patologías benignas como lipomas o fibromas provocan de manera frecuente nódulos (bultos) en el pecho.
La mamografía y la ecografía mamaria son test complementarias, que tienen la posibilidad de aportar un resultado mucho más completo en el momento en que hay inquietudes en los resultados o quiere confirmarse el informe. La mamografía y la ecografía mamaria son ambas pruebas identificativas. Mientras que la ecografía mamaria usa ultrasonidos, la mamografía usa una mínima radiación.
Para llevar a cabo una mamografía, la tolerante se coloca parada frente a una máquina de rayos X. El auxiliar ayuda una de las 2 mamas encima de una placa de plástico transparente y después la tapa con otra placa presionando firmemente. Esta placa aplana la mama y la fija inmóvil mientras que se realiza la radiografía. Ahora, se reitera el proceso con el otro seno.
Preparación previa de la mamografía
No es conveniente presentarse a una mamografía a lo largo del periodo menstrual, en tanto que las mamas van a estar hinchadas y sensibles y puede ser especialmente molesto.
El día identificado para la mamografía, se recomienda no ponerse ni desodorante ni colonias pues podrían alterar los desenlaces.
Peligros de una mamografía
En una mamografía, como en cualquier otro tipo de radiografía, el nivel de radiación es bajo. No obstante, si te encuentras embarazada o piensas que puedes estarlo, o andas amamantando, no tienes que someterte a una mamografía programada. Si es totalmente preciso, tu médico te ofrecerá las normas especiales a seguir. En la situacion de las embarazadas, si es necesario realizar un control, se opta por una ecografía mamaria.
A partir de los cuarenta años, los expertos recomiendan llevar a cabo una mamografía anual de manera rutinaria.
Ten en cuenta que para hacerse una mamografía es indispensable tener prescripción médica.
Una radiografía permite obtener una imagen de la zona anatómica precisada y de los órganos internos de la misma. La radiación penetra en la parte del cuerpo y se imprime en una placa fotográfica que permitirá al médico identificar características anómalas y hacer un diagnóstico.
La radiografía es una herramienta diagnóstica fácil y segura. Si has tenido una lesión o accidente y crees que puedes tener un hueso roto, una radiografía puede darte una respuesta. Además, también permite detectar quistes o tumores en la zona analizada.
Si tienes menos de 30 años y has notado un bulto en tus pechos, una ecografía mamaria es la mejor opción para determinar si existe alguna patología. Esta técnica es la más precisa con la detección de tumores en pechos jóvenes y evita la radiación en mujeres embarazadas.
El TAC o escáner es una radiografía especial que permite ver los huesos y fracturas con mayor detalle, así como algunos tumores, daños al sistema circulatorio, entre otros.